Indonesia es un país mágico con multitud de maravillas naturales que deslumbran al turista. Una de ellas es el espectacular Parque Nacional del Bromo Tengger Semeru, uno de esos lugares del mundo que no se olvidan con facilidad. Visitar el volcán Bromo por libre fue una de las mejores experiencias que tuvimos en nuestro viaje por el sureste asiático.

En este post, aparte de contarte como llegar hasta aquí, la mejor forma de visitarlo o algunos consejos para disfrutar de esta increíble visita, te contaremos como acceder al parque nacional y al volcán por la entrada local, sin pagar el acceso.

🏞️Parque Nacional del Bromo Tengger Semeru🌳

📅Días recomendados para visitar el Bromo⏳

🚌¿Cómo llegar al Monte Bromo?🚗

🥾Visitar el Monte Bromo (Amanecer y ruta al cráter del volcán) por libre🌋

🏨¿Dónde dormir en el Monte Bromo?🛏️

📖Consejos para tu visita al Monte Bromo🇮🇩

🏞️Parque Nacional del Bromo Tengger Semeru🌳

El Monte Bromo y su paisaje lunar son sin ninguna duda una de las estampas más impresionantes de Indonesia. En este macizo surgen tres volcanes; el Kursi, el Batok y el Bromo. Este último es el más bajito de los tres (2329m) y el más accesible. Es la forma del volcán, el paisaje que le rodea y las vistas de su cráter, lo que hacen que sea uno de los volcanes en activo más famosos y visitados de Indonesia y por supuesto, no te lo puedes perder.

📅Días recomendados para visitar el Bromo⏳

Para visitar el monte Bromo y disfrutar tanto de la ruta, como del amanecer, recomendamos hacer noche en la zona. Bajo nuestro punto de vista, lo ideal es pasar dos días en el pequeño pueblo que se encuentra a las puertas del volcán; Cemoro Lawang.

🚌¿Cómo llegar al Monte Bromo?🚗

El Monte Bromo se encuentra en la isla de Java y se accede, en la mayoría de los casos, desde la pequeña población de Probolinggo. Desde este pequeño pueblo tienes que transportarte hasta Cemoro Lawang, principal pueblo del parque nacional y desde donde comienza la ruta al cráter del Bromo.

Nosotros llegamos a Probolinggo desde la gran ciudad de Surabaya, desde la que cogimos un bus que duró alrededor de 2h y nos costó 35000RP/persona (en torno a 2€). Una vez nos plantamos en Probolinggo, empezó la aventura.

Habíamos leído en varios blogs que hay que tener cuidado con la mafia que se encarga de subir a los turistas desde la estación de buses de Probolinggo a Cemoro Lawang y ciertamente, lo comprobamos en nuestras carnes. Una vez se llega a la estación de buses de Probolinggo, varios locales te preguntarán que donde te diriges, con la intención de acercarte por un módico precio. Nosotros, por nuestra experiencia, recomendamos que no les digáis nada ni les prestéis atención y salgáis a la carretera principal. Allí a mano izquierda, debería haber algún tipo de mini furgoneta de color verde aparcada a algún lado de la carretera a la que te tendrás que acercar para preguntar si se dirige a Cemoro Lawang (suelen estar aparcadas casi siempre en el mismo lugar).

Esta mini furgoneta solo sube a Cemoro Lawang cuando le sale rentable al conductor, por lo que puedes tener suerte y que cuando llegues, haya gente esperando para subir al pueblo y no tardar mucho o ser el primero en llegar y que te toque esperar al resto. Suele tener en torno a 15 asientos y el conductor pone el precio que le da la gana dependiendo de la gente que viaje ese día. Si hay muchos asientos vacíos, te tocará pagar por ellos para subir y sino, esperar a que se llenen. Otra opción es andar por esa carretera hasta encontrar algún tipo de agencia que ofrezca transportes privados hasta Cemoro Lawang, más cómodo, pero también bastante más caro.

Estas furgonetas de la “mafia probolingga”, suben como tarde a las 16h, para que luego les dé tiempo a bajar de nuevo, por lo que te recomendamos que, si eliges esta forma de llegar a Cemoro Lawang, llegues a Probolinggo por la mañana.

Nosotros llegamos allí a las 11 de la mañana y como no era época alta de turismo y encima entre semana, nos tuvimos que quedar esperando hasta las 16h (ese día solo subió una furgoneta). Finalmente subimos 6 personas en la mini furgoneta, pagando 80000RP/persona (5€). Este trayecto, con el conductor llegando a fumarse 20 cigarrillos, sin aire acondicionado y lleno de curvas, son casi dos horas, aunque la verdad que se nos hicieron como 5.

Una vez la furgoneta te deja en Cemoro Lawang, toca respirar aire puro y por fin, disfrutar de la visita y del increíble paisaje. Lo mejor estaba por llegar.

🥾Visitar el Monte Bromo (Amanecer y ruta al cráter del volcán) por libre🌋

Está claro que hay cosas que no te puedes perder en el Monte Bromo y una de ellas es el amanecer. Tras hacer noche en Cemoro Lawang, toca levantarse sobre las 4 de la mañana y hacer la ruta a los miradores para disfrutar del amanecer con los volcanes de fondo. Recomendamos que cada día consultéis la hora del amanecer para que vayáis con tiempo. Pues, aunque sea por minutos, va variando día a día y cuándo se habla de retrasar el despertador, todo cuenta.

No os olvidéis la chaqueta o algo que os proteja del frio, pues en la zona de los miradores a esa hora, la temperatura suele ser baja. Nosotros no habíamos pasado tanto frio en el sureste asiático en tres meses, así que no cometáis nuestro mismo error e id bien preparados. También necesitarás una linterna, un frontal o el móvil para iluminaros en el camino, ya que será de noche cuando empecéis a andar.

La ruta a los miradores es de subida, pero no es muy complicada. Se comienza desde la carretera asfaltada que hay a la derecha del Hotel Cemoro Indah. No tiene pérdida y además verás un montón de gente seguir el mismo camino a esas horas de la mañana.

La ruta a los miradores dura alrededor de 1h dependiendo de tu ritmo y acaba en el View Point 1. Antes de llegar a este mirador pasarás por el View Point 2 y un montón de lugares y zonas donde poder sentarte para disfrutar del amanecer. El View Point 1, situado en la King Kong Hill, se suele encontrar algo más masificado, ya que es donde se dirigen algunos jeeps contratados para hacer excursiones organizadas, por lo que, aunque se encuentra algo más bajo, recomendamos más el View Point 2 para disfrutar el increíble amanecer sobre el Monte Bromo.

Una vez vimos el amanecer, volvimos a subir hasta el View Point 1, donde se encuentran una serie de puestos donde nos tomamos un buen café calentito. Había que despertarse y entrar en calor y eso lo saben bien los vendedores de la zona.

A partir de aquí comienza el descenso hasta la base del volcán. Esta es la parte más sencillita de la ruta y comienza desde el propio View Point 1. Si quieres visitar el volcán por libre, has de desrecorrer lo andado hasta que te encuentres este puente que atraviesa un pequeño riachuelo.

En este momento, toma la bajada que se encuentra al final y a su derecha (según vas de bajada) para pasar por un camino de arrozales y campos de cultivo. Este camino desemboca en el “Sea Sand” o llanura del volcán, donde ya solo has de dirigirte por el camino marcado hasta su propia base.

Una vez se desemboca en el Sea Sand se tarda alrededor de media hora en llegar a la base del volcán. Allí te encontrarás con un fabuloso templo hindú a partir del cual, solo queda ascender al cráter. El ascenso se hace a través de una serie de cuestas y escaleras hasta que llegas arriba del todo, donde la sensación y las vistas te dejan sin aliento. Simplemente el hecho de ver la caldera de un volcán en activo es espectacular, pero las increíbles vistas del mar de arena y del paisaje que lo rodea, hacen de este volcán un lugar tan especial que recordarás toda tu vida.

Tras bajar del cráter, solo queda volver al pueblo de Cemoro Lawang. Para ello tendrás que volver al mar de arena y coger el camino de arena con dirección al pueblo (es fácil reconocerlo). Tendrás que dirigirte dirección al Lava View Hotel, desde donde se adquieren una de las mejores vistas del volcán de la zona. Este trayecto de vuelta dura 1 hora en la que te irás cruzando con locales a caballo y algún turista hasta que llegues al pueblo.

Si llegas antes de las 12, seguramente te compense dirigirte al Café Lava Hostel, en el interior del pueblo, donde sirven desayuno buffet hasta esa hora por un precio de 50000RP/persona (en torno a 3 €). No os decimos cómo entra un buffet tras la ruta, pero os lo podéis imaginar.

Respecto a la entrada al Parque Nacional, hay gente que prefiere pagar un tour organizado con subida al mirador en jeep y transporte al cráter. El precio de estos tours suele andar en torno a las 200.000 RP, a las que deberías sumar la entrada de 300.000 RP (sobre 20€). Es una opción si no te gusta andar o no te importa gastarte el dinero. Aunque hemos de reconocer que para nosotros este tipo de viajes son también una aventura y no hay nada como andar de noche, sentirte libre en el mar de arena o ir caminando tranquilamente y parándote a hacerte fotos cuando quieras, sin ningún tipo de prisas. Por todo esto somos más partidarios de visitarlo por libre y si a vosotros también os interesa, aquí os dejamos nuestra experiencia.

La opción que aquí tratamos para el que quiera, poder abolir los gastos del Parque Natural, es simplemente una de tantas. Hablando con locales, nos transmitían que el dinero de la entrada va íntegro a las arcas de un gobierno más que corrupto y que ellos no ven nada y por lo tanto no se destina ni una rupia al mantenimiento del parque ni del pueblo. Cada uno que elija la opción que más le apetezca siempre de una forma responsable.

🏨¿Dónde dormir en el Monte Bromo?🛏️

Nosotros hicimos noche en el Bromo Otix Guesthouse. No te esperes maravillas de los alojamientos de esta zona, donde a excepción de Lava Hotel, el resto son de una calidad muy parecida con los servicios básicos y poco más.

📖Consejos para tu visita al Monte Bromo🇮🇩

• Lleva ropa de abrigo, la necesitarás. Sobre todo, en el ascenso nocturno a los miradores y durante el amanecer. Es una zona fresca y cuando se va el sol, las temperaturas suelen ser bajas.
• Lleva suficiente dinero en efectivo pues en Cemoro Lawang no hay cajeros.
• Puedes ver el atardecer desde el Lava Hotel View o bien subir a los miradores, pero para ello tendrás que volver al pueblo de noche.
• Respeta el entorno en el que te encuentras y, sobre todo, disfrútalo.